Hemos dicho en el anterior post que el émbolo se desplaza sobre la superficie del cilindro, por lo que entre ambos debería haber un coeficiente de fricción bajo para impedir un fuerte desgaste en el movimiento alternativo del émbolo. Bien, esto sólo es así en los cilindros sin camisa, y esto suele ser sólo en motores pequeños.

Su principal ventaja es que son mucho más baratos, pero tiene la gran desventaja de que necesitamos usar materiales de muy buenas características rozantes, por lo que el peso se nos va de madre. Además, a medida que el cilindro se va desgastando tenemos que dar rectificados de conicidad y ovalización. Haciendo esto debilitamos la pared, por lo que sólo podremos hacerlo un número determinado de veces.